Fuente: Diario La Nación

En el nuevo escenario epidemiológico, el ataque cerebrovascular (ACV) o stroke es un cuadro en alza. Es más: estudios internacionales sugieren que no sólo crece al ritmo de la expectativa de vida, sino que se presenta con mayor frecuencia a edades más tempranas.

Si bien las secuelas de un accidente cerebrovascular son difíciles de cuantificar ni bien el episodio ocurre, existe un tratamiento que, aplicado durante las primeras horas de los síntomas, previene la discapacidad permanente. Qué hacer cuando las señales aparecen al despertar

Un 15% de las personas que sufren un accidente cerebrovascular (ACV) no recibe tratamiento trombolítico porque todo ocurrió mientras dormían.

Una de las consecuencias más frustrantes de un ACV es perder la función en las manos, los brazos y las piernas. Los investigadores han descubierto que la estimulación eléctrica cerebral no invasiva a los dos hemisferios pueden ayudar a pacientes con accidente cerebro-vascular a recuperar las habilidades motoras.

Dolor Musculoesqueletico y su impacto en la función mótora entre sobrevivientes de ACV

El derrame cerebral a menudo resulta en el deterioro considerable de la función sensorial, motora, funciones de la percepción y el lenguaje. Sus secuelas incluyen las parestesias y síndromes de dolor crónico, con el posible daño del sistema nervioso.

Las personas que se han decidido a salir de casa luego de sufrir un ACV han sido invitadas a participar en un nuevo estudio que podría ayudar a volver a ponerlos en el camino a la independencia.